Una familia denunció penalmente a la Sección de Infantería por tirarles gas pimienta en el rostro

Una joven y su padrino denunciaron en la Policía que efectivos de Infantería les arrojó gas pimienta, mientras estaban en la puerta de su casa. Fue durante la madrugada y se desconocen las circunstancias. El certificado médico que les entregaron en el Hospital Zonal certifica las lesiones oculares que sufrieron.

Una joven y su padrino denunciaron en la Policía que efectivos de Infantería les arrojó gas pimienta, mientras estaban en la puerta de su casa. Fue durante la madrugada y se desconocen las circunstancias.

Una familia denunció haber sufrido un hecho de abuso policial por parte de efectivos de Infantería, el pasado domingo a la madrugada, cuando se encontraba en la puerta de su casa del barrio Jardín de Caleta Olivia, “tomando aire”.

De acuerdo a lo que relataron los afectados, Alfredo “Kathy” Mansilla de 42 años y su sobrina Alison Espósito (17), un policía les tiró gas pimienta en los ojos.

La denuncia fue radicada en horas de la tarde de ese mismo día en la Comisaría Segunda, donde la familia recuerda que una mujer policía les dijo que “hacían bien” debido a que, por más que sean compañeros, “hicieron un mal trabajo”.

Al mediodía de este martes deben acercarse a la Seccional para retirar la denuncia y luego ver cómo sigue el trámite en la Justicia.

“Vamos a seguir haciendo lo que corresponda, no queremos que esto quede en la nada, aunque sabemos que no va a pasar nada con esto. Nosotros queremos que se haga público el abuso que sufrimos con mi sobrina, no vamos a dejar pasar esto”, comentó Mansilla.

“Se me cerraba la garganta, no podía respirar, fue horrible lo que nos pasó junto a mi ahijada”, dijo. Recuerda que le dio bronca no haber podido defender a su ahijada, que es menor de edad.

“La escuché llorar y gritar del dolor que sentía, pero si hubiese hecho algo sé que ahora estaría preso”, añadió. Ambos tuvieron los ojos irritados, padecieron tos, falta de aire y dolor en el pecho.

Eran alrededor de las 2 de la madrugada del domingo, cuando Mansilla y Espósito fueron afectados por el uso del compuesto químico.

La joven contó: “Estábamos con mi tío sentados en la vereda, él estaba fumando, cuando paró una trafic de Infantería y bajaron tres policías que nos repetían: están en la vía pública una y otra vez, yo les expliqué que era mi casa, pero sin pedirnos los datos querían ponernos contra la trafic”.

Uno de los hermanos de la joven vio lo que sucedía y les abrió la puerta de la casa, “entramos y uno de los efectivos nos tiró gas pimienta en los ojos”.

A partir de ese momento, entre la desesperación de la familia, intentaron calmar el efecto de irritación con agua y salieron a la calle para respirar. “Los de Infantería se fueron y no volvieron, a pesar de lo que hicieron”.

En la calle se cruzaron con un patrullero y le explicaron lo que había sucedido. La Policía les recomendó que denuncien y que vayan al Hospital Zonal para certificar las lesiones.

En el nosocomio estuvieron desde las 2:30 hasta las 5 horas, recibieron inyecciones y medicamentos para contrarrestar las consecuencias del gas.

Fuente: La Opinión Zona Norte.