Un juez de Río Gallegos tomará la causa de la niña que atropelló Quelín

Avanzada la tarde de ayer se esperaba que Tania Mansilla, la niña de 11 años que fue atropellada por el juez Eduardo Quelín a mediodía del sábado en Perito Moreno, recibiera el alta médica. El magistrado aún no se comunicó con la familia para conocer el estado de salud de la niña. En la causa tomará intervención un juez de Río Gallegos.

La madre de la víctima, Carla Cherbakov, dijo ayer que solo restaba conocer los resultados de una resonancia magnética que le practicaron a su hija para que le dieran el alta, algo que estaba previsto sucediera en las últimas horas de la tarde.
“Lo único que queremos es que tanto ella como nosotros podamos volver a Perito para descansar. Sabemos que va a ser largo el proceso de recuperación pero lo importante es que por ahora está bien”, manifestó.
Mientras, el abogado querellante, Carlos Linares, indicó a El Patagónico que se encuentran en la búsqueda de personas que hayan presenciado el accidente y que puedan oficiar como testigos para la causa, ya que el único testimonio con el que cuentan hasta ahora es el de la abuela de la niña, Blanca Moyano.
Asimismo, hizo saber que pedirá la historia clínica de la menor al Hospital Zonal de esta ciudad, donde permanecía internada desde el sábado, habiéndosele practicado una intervención quirúrgica en su brazo derecho durante el domingo.
Con respecto al proceso judicial, Linares reveló que a partir de ahora intervendrá un magistrado de Río Gallegos –no conociéndose aún de quien se trata– en la causa que está caratulada como “lesiones graves culposas” y anticipó que podría solicitar que el juez Quelín sea inhabilitado para conducir por un lapso de 2 o 3 años.
Cabe mencionar que es probable que con el tiempo se realice una suspensión del proceso a prueba, establecido en el Artículo 277 del Código Procesal Penal Provincial, lo cual implicaría que cumpla con tareas comunitarias y realice el pago de una multa, entre otras cuestiones.

IRRESPETUOSO
En tanto, este medio intentó comunicarse telefónicamente con el magistrado para conocer su versión de los hechos, a lo cual se negó a acceder rotundamente y sólo atendió requerimientos de medios televisivos de Buenos Aires.
“Yo con boludones no hablo”, fue la insultante respuesta del magistrado a un periodista de El Patagónico ayer, recordándose que hace pocos años también dijo que no dialogaba con periodistas de la zona porque “hablan pelotudeces”, lo que refleja el escaso respeto con los trabajadores de su región.
Lo cierto es que en este caso Quelín incurrió en una burda mentira hacia el periodismo de Buenos Aires, ya que se le escuchó decir que se había comunicado con la familia de la niña que atropelló, lo cual fue desmentido por la madre de la víctima.
El accidente de tránsito ocurrió el sábado a las 12:30 cuando Tania, junto a otros tres hermanos y su abuela, estaban por cruzar la avenida San Martín, cuando la menor, que ya se encontraba sobre la calle a un metro del bulevar, no advirtió que se acercaba el Mercedez Benz, dominio OEK 065, conducido por el magistrado y fue embestida.
“Parece que Quelín aceleró para cruzar el semáforo que ya se había puesto en amarillo y fue ahí cuando atropelló a mi hija”, señaló oportunamente Cherbakov.

(Fuente: El Patagonico.)