Femicida intentó quitarse la vida

Se trata de Jorge Marcelo Huenumil, quien se encuentra detenido en la Comisaría Séptima por el homicidio de Romina Barría ocurrido en octubre pasado en el barrio San Benito. Se cortó los brazos con un elemento filoso que quitó de un colchón. Fue asistido y ahora concurre al Centro de Salud Mental.

El sujeto que mató a su ex pareja en el barrio San Benito, intentó suicidarse. Se trata de Jorge Marcelo Huenumil (35), quien se encuentra detenido en la Comisaría Séptima de esa barriada. El pasado miércoles, se cortó los brazos con un elemento filoso que quitó de un colchón, indicaron las fuentes policiales.
Fue hallado desangrando por un celador, y fue trasladado al Hospital Regional donde fue asistido. Las lesiones no fueron de gravedad, según se pudo conocer. También se informó que es el único preso que se encuentra alojado en esa comisaría.
La juez Valeria López Lestón estableció que sea trasladado al Centro de Salud Mental para que reciba asistencia psiquiátrica. A mediados de octubre, la magistrada resolvió dictarle la prisión preventiva, porque había pruebas suficientes para imputarle el homicidio de su ex pareja, Romina Barría (30) ocurrido el pasado 4 de octubre. Luego habría provocado el incendio de la vivienda de la víctima, para emprender la huída con la hija de ambos, siendo detenido por la Policía en la localidad de Piedra Buena.
La magistrada decidió procesarlo con figura del femicidio. La Ley 26.791, sancionada el 14 de noviembre de 2012, que modificó el artículo 80 del Código Penal, establece que el homicidio de una mujer, cuando sea perpetrado por un hombre mediando violencia de género, será reprimido con la máxima pena prevista por el sistema penal, es decir la cadena perpetua.
Desde la localidad neuquina de Villa La Angostura han arribado su madre y hermanos de Huenumil, para visitarlo en la comisaría. También lo hizo su padre en las últimas semanas.
En tanto que la familia Barría tiene como abogado a Carlos Muriete, y se ha presentado como parte querellante, para poder tener acceso a la causa, y a su vez, solicitar medidas de prueba mientras se instruye la misma. Para el letrado, el imputado trata ahora de simular que cometió el crimen bajo “emoción violenta”.
La juez sigue recabando pruebas y testimonios, en especial del entorno de la víctima.

(Fuente: La Opinión Austral.)