El imputado por el crimen de Sarmiento dice que la víctima siempre lo provocaba a pelear

Sergio Lempis, el sereno municipal que se entregó a la Justicia luego del asesinato de David Ismael Perán -quien debía realizar en el lugar donde ocurrió el homicidio las últimas horas de trabajo comunitario como parte de una medida judicial por la que cumplió condena en Comodoro Rivadavia-, pasará cuatro meses en prisión preventiva mientras avanza la investigación del caso. “Siempre me provocaba para pelear, me tenía cansando”, declaró en su defensa.

Es un hombre que trabaja, que cumplía con su labor señalaron en el municipio de Sarmiento al consultar por el historial de Sergio Lempis (53). El lunes a la mañana habría sido quien le dio muerte a David Ismael Perán (36). Este recibió una certera puñalada que le afectó el ventrículo izquierdo. Habían tenido una discusión a metros de donde cada uno trabajaba en diferentes horarios.
Después que se entregara durante la misma jornada del lunes, ayer al mediodía Lempis fue sometido a una audiencia de control de detención y apertura de investigación. En ese acto judicial que fue presidido por el juez Roberto Casal, se le dictó cuatro meses de prisión preventiva por pedido de la Fiscalía que estuvo representada por la fiscal Laura Castagno y la funcionaria Marisol Sandoval.
De esa forma, el sereno municipal, que fue asesorado por el defensor público Gustavo Oyarzún, deberá permanecer detenido en la comisaría de la localidad mientras avanza la investigación en su contra, la cual se extenderá seis meses bajo la caratula de presunto autor del delito de homicidio simple.

UN CERTERO CORTE

El homicidio por el que se lo investiga a Lempis ocurrió el lunes por la mañana, alrededor de las 7:30. A esa hora, salía de la Secretaría de Obras Públicas de la Municipalidad, ubicada en General Roca, entre Alberdi y Uruguay, luego de una larga jornada de trabajo.
En ese lugar habría mantenido una discusión con Perán, quien iba a cumplir las últimas dos horas de trabajo comunitario (un total de 18), como parte de las medidas que se le dictaron en el marco de la libertad condicional que cumplía por una causa en la que fue condenado. Por la misma había estado detenido en la alcaidía de Comodoro Rivadavia.
Según el testimonio del imputado, la víctima lo habría insultado, iniciándose la discusión que culminó con el hombre herido. El presunto autor habría sacado de su camioneta un cuchillo con el cual le habría proferido dos cortes. Perán recibió un puntazo en la zona del tórax que le afectó el ventrículo izquierdo, produciéndole minutos después la muerte.
Así, de nada sirvió la ayuda que alcanzó a pedir en el mismo galpón de Obras Públicas al que Perán llegó malherido. Fue trasladado al Hospital Rural donde finalmente falleció.

“ME TENIA CANSADO”

En la audiencia de ayer Lempis -quien luego del incidente dio aviso a su capataz sobre lo ocurrido y se entregó en la comisaría de la localidad a la que llegó con el cuchillo-, explicó que con la víctima mantenían diferencias desde hace tiempo y que en varias oportunidades Perán lo había desafiado a pelear en la calle, al igual que en el interior de un local comercial.
Así al terminar su trabajo escuchó que Perán lo llamaba. Este último se le acercó y le habría reprochado un presunto problema que mantendría con uno de sus hermanos.
“Cuando se acercó, me dio miedo, pensé que tenía algo en las manos, por eso usé el cuchillo y me di cuenta que lo corte”, manifestó el sospechoso. “Me tenía cansado”, agregó.
En el municipio, donde Lempi estaba contratado por día, lamentaron el incidente, y afirmaron que dejarán que la Justicia actúe, ya que entienden que lo ocurrido se produjo afuera de la Secretaría y es ajeno a la relación laboral que ambos mantenían con la comuna.
“Estamos entristecidos, no vamos a tomar ninguna decisión, consideramos que Lempis es un hombre que trabajaba y era un operario que cumplía su labor”, señaló el intendente Ricardo Britapaja, quien confirmó que a la víctima solo le quedaban dos horas de trabajo comunitario para completar la medida judicial que se le había impuesto.

(Fuente: El Patagonico.)