Alumnos de la Escuela N° 15 disfrutaron de una jornada de lectura

El programa Abuelas y Abuelos Leecuentos es un emprendimiento conjunto de PAMI y el ministerio de Educación de la Nación que se inició en 2006 y apunta a fortalecer los encuentros intergeneracionales, utilizando a la lectura como actividad.

El pasado martes, en el marco del “Programa Abuelas y Abuelos Leecuentos”, el PAMI llevó adelante una jornada de lectura destinada a los alumnos de la Escuela Pcial. Primaria N° 15 “Pcia. de Santiago del Estero” , ubicada en calle Pellegrini N° 357 de esta ciudad capital.

El “Programa Abuelas y Abuelos Leecuentos” que impulsa el PAMI, tiene como finalidad que los adultos puedan integrarse con los más jóvenes mediante la lectura. Adultos mayores afiliados al PAMI, recorrieron  varias aulas del establecimiento educativo realizando esta actividad que se centra en la lectura en sí misma, siendo el eje motor de cada encuentro el “leer por leer”, despojado de cualquier otra tarea agregada.

Esta práctica cumplió con las expectativas de quienes dirigen y coordinan esta actividad desde el PAMI, siendo una experiencia invalorable para los Jubilados y Pensionados que leyeron para los niños. Los docentes agradecieron la iniciativa debido a la notoria participación de los alumnos con sus propias experiencias desde la narración.

Se trata de un programa participativo e integrador que involucra a personas con vocación y deseos de realizar lecturas tanto a niños en edad escolar como a adolescentes y adultos, proveyéndoles de esta experiencia de afecto y unión, fundante en toda vida. El objetivo principal del mismo es promover la tradición de la lectura a través de la creación de espacios de encuentro intergeneracional que preserven la hermosa y antigua costumbre de leer cuentos en voz alta.

El Programa moviliza principalmente a adultos mayores que, voluntariamente, deciden encarar la tarea de llevar lecturas allí donde se las necesita, asignándoles de esta manera un rol significativo y relevante dentro de su comunidad. A su vez, desata energías y propone actividades en todas las instituciones a las que llegan los Leecuentos -como escuelas, comedores comunitarios, hospitales, residencias para mayores, institutos para discapacitados- cuyos directivos, docentes, profesionales y estudiantes participan de la experiencia de manera entusiasta