CAME le pidió al Banco Central mejoras en el financiamiento para PYMES

Según una encuesta realizada por la Confederación Argentina de la mediana Empresa (CAME) entre 300 industrias pequeñas y medianas, el 57,4% de las empresas que necesita crédito lo obtiene fuera del sistema financiero en condiciones más desventajosas. “Se trata de fondos propios o préstamos de muy corto plazo que se consiguen de familiares, amigos, proveedores, o prestamistas”, señaló Pedro Cascales, secretario de industria de la entidad, y añadió: “solo el 6,6% de las Pymes usa financiamiento de programas públicos”.

La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) participó ayer de la convocatoria que el presidente del Banco Central (BCRA), Alejandro Vanoli, realizó a las principales cámaras empresarias del país para debatir sobre la política crediticia destinada a las pequeñas y medianas empresas.

El secretario de industria de la entidad, Pedro Cascales, destacó que “los programas de financiamiento lanzados por el Gobierno desde 2012 y las mayores regulaciones aplicadas resultaron muy importantes para incrementar la participación de las PyMES, especialmente de las industriales”. En ese sentido, la encuesta realizada por CAME arrojó un crecimiento en el porcentaje de empresas que buscó financiamiento y lo obtuvo: de apenas 17,8% en septiembre de 2012 se pasó a 52,7% en 2015. Aunque el 57,4% de las empresas que necesita crédito lo obtiene fuera del sistema financiero en condiciones más desventajosas.

Por último, Cascales enumeró una serie de propuestas para beneficiar a las PYMES:

• Segmentar el crédito productivo definiendo los porcentajes que los bancos deberán destinar a las micro, pequeñas, y medianas empresas.

• Mayor orientación de las líneas para financiar pre y post exportaciones, ya que pocos bancos las ofrecen para ese fin. Hay sectores, sobre todo en aquellas industrias PyMES que exportan productos de alto valor, donde las empresas actualmente no están logrando realizar operaciones en el exterior porque no pueden ofrecerles plazos de pago a los clientes.

Y si bien está dispuesto que las LCIP también se usarán para incrementar la capacidad exportadora de las empresas, es necesario trabajar en este aspecto.

• Disponer una línea de financiamiento especial para las PyMES proveedoras de empresas públicas. Actualmente los pagos a las proveedores se están realizando a 60, 90 e incluso más días. Es por ello que se requiere establecer mecanismos por las cuales esas firmas puedan obtener fondos contra ventas realizadas a compañías como YPF, FFCC, FM, YCRT, Aerolíneas, etc. De manera que, a partir de la entrega del certificado de venta concretada, los bancos otorguen el financiamiento correspondiente según el plazo de pago estipulado en la operación de compra y venta, ya que resulta una forma indirecta de financiar al Estado.

• Limitar el costo financiero que cobran los bancos a las PyMES por los descubiertos en cuenta corriente, teniendo en cuenta que es una de las principales fuentes de financiamiento que tienen esas empresas. Actualmente una PyME paga más de 40% anual por esa modalidad.

• Regular los montos máximos de comisiones de comercio exterior, y en particular, los montos mínimos que se aplican a la mayoría de las exportaciones de industria, dado que muchas PYMES industriales frecuentemente realizan ventas menores a 10 mil dólares y las comisiones y gastos bancarios llegan a representar el 5% del valor de la operación.

• Promover más el leasing en las líneas de financiación productiva con plazos de hasta 48 meses al 18% anual en pesos.

• Promover créditos de máquinas con prendas sobre las mismas.

• Trabajar en conjunto con el sector público, bancos y entidades gremiales empresarias en difundir estas líneas de crédito.