Caleta Olivia fue todo oídos para la Sinfónica Nacional

Ni lo más optimistas organizadores pensaban que miles de personas iban a agolparse ante el Complejo Deportivo Municipal para escuchar música clásica en vivo.

La presentación de la Orquesta Sinfónica Nacional en Caleta Olivia, este miércoles 25 por la noche, quedará marcada para siempre en la historia de la ciudad.

Fue la primera vez que se presentó en esta ciudad.

No sólo emocionó la presentación de noventa músicos en escena, que interpretaron algunas de las piezas más excelsas de las composiciones latinoamericanas y de otros lugares, sino que todos los organizadores se miraban con mucha alegría al ver que familias muy humildes.

Con sus chicos de todas las edades se habían sentado en las gradas del recinto y permanecieron absortos, en un silencio admirador, melómano, durante casi toda la hora y media del concierto.

“Esto me emociona realmente. Quién iba a pensar que en Caleta podría suceder esto”, dijo Daniel, un músico reconocido de la ciudad, al ver la cantidad de personas aplaudiendo a la máxima conformación de músicos del país. “Por un momento parecía otra Caleta, sin líos, ni problemas, todos en paz”, comentó otro espectador.

El maestro Guillermo Becerra, director, fue afable, didáctico, explicó cada tema, y el programa estuvo acorde a la circunstancia. Fue una selección certera, para despertar la curiosidad del público que nunca escuchó un concierto de música clásica en vivo.

Primero asombró la orquesta con algo de uno de los grandes argentinos, Gilardo Gilardi, y los reconocibles ritmos pampeanos; y después vino algo más suave con una pieza de otro gran compositor nacional como es Julián Aguirre. Después, un bandoneonista que hizo de solista ante la orquesta, se despachó con tres temas de Piazzolla.

Luego, el programa se hizo más internacional con un clásico mejicano y cerró con lo más colorido, una mágica mixtura de ritmos jazzísticos y centroamericanos que compuso ese gran maestro norteamericano y también gran promotor de la música clásica para el pueblo: Berstein.

Al final, sólo quedó un fuerte aplauso en pie de las más de tres mil personas que llenaron el Complejo, fue un gracias rotundo de las familias caletenses por haber traído lo más complejo, l El director también agradeció por la hospitalidad a los caletenses, y también a los senadores Pablo González y María Ester Labado por la gestión para traer a la Sinfónica a Santa Cruz.

Igualmente, reconoció el esfuerzo de la Dirección de Cultura de la Municipalidad por ser “tan buenos anfitriones”.o más rico de la música universal a estas duras tierras del Gorosito.

(Fuente: La Vanguardia Sur.)