Condenaron a un carpintero por venta de estupefacientes

Un carpintero de la localidad de Corcovado fue condenado a la pena de 4 años de prisión en un juicio unipersonal que se llevó a cabo en la sede del Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia. El delito por el cual se lo declaró penalmente responsable es el de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.

El juicio oral y público se llevó a cabo en la sala de audiencias del Tribunal Oral Federal, el cual estuvo presidido por la juez Nora Cabrera de Monella. El Ministerio Público Fiscal estuvo representado por el fiscal general, Teodoro Nürnberg, mientras que el imputado Carlos Rubino fue asistido por la abogada de la Defensa Pública, Verónica Fernández Van Rapp

La causa que llegó a juicio la inició la Policía Federal de Esquel con el respectivo control fiscal, desde donde se instruyeron las actuaciones que permitieron hacer seguimiento al sujeto sobre quien se sospechaba que comercializaba estupefacientes.

En un posterior allanamiento en el domicilio del sospechoso, la policía encontró estupefacientes, balanza y dinero en efectivo, todo lo cual fue secuestrado como evidencia y presentado como prueba en el debate.

En la indagatoria, el imputado declaró que todo lo que tenía era para consumo, afirmó que nunca se dedicó a la comercialización y que la droga la adquirió a precio muy bajo. También aseguró que consumía los fines de semana, aunque la marihuana en la semana fumaba día por medio, que tenía muchos conocidos en Esquel y que la gente con la que se encontraba eran compañeros con los que jugaba el fútbol.

En el debate declararon todos los policías que participaron de las tareas de seguimiento y vigilancia, de las cuales surgieron grabaciones de video y escuchas telefónicas.

Tras incorporarse toda la prueba testimonial y documental se llevaron a cabo los alegatos y finalmente la magistrado resolvió declararlo penalmente responsable del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, imponiéndole una pena de 4 años de prisión de efectivo cumplimiento.

(Fuente: El Patagonico.)