Comandos superiores ocultaron el acercamiento de un submarino británico

Nuevos testimonios de personal de la Armada continúan sumándose a la causa que se tramita en el Juzgado Federal de Caleta Olivia para determinar responsabilidades penales por la desaparición del submarino ARA San Juan y de sus 44 tripulantes.

Otro testimonio reafirma que submarinos británicos habrían seguido al ARA San Juan
Los testimonios que se recibieron durante la última semana no solo reafirman numerosas fallas que tenía la nave sino que también dejan entrever que dos jefes de comandos superiores habrían ocultado información sobre el posible acercamiento de un submarino británico durante las dos últimas misiones que tuvo la nave argentina. También sobre la presencia de un misterioso dron submarino en medio del operativo de búsqueda de la nave desaparecida.

Sonia Kreischer, quien integra del grupo de abogados querellantes en la causa que se ventila en el Juzgado Federal de Caleta Olivia, reveló detalles del testimonio que expuso un oficial que fue director de Inteligencia Táctica de la Armada.
Caleta Olivia (agencia)

Esto último fue lo que le llamó la atención a la abogada comodorense Sonia Kreischer quien hace pocas semanas se sumó como querellante en sociedad con Luis Tagliapiera para representar a familias de los submarinistas en las audiencias que son presididas por la jueza Marta Yáñez.

En declaraciones formuladas a El Patagónico, la letrada resaltó en principio la seriedad con que la magistrada, sus secretarios y el fiscal Lucas Colla llevan adelante la causa que continúa caratulada como “averiguación de ilícito” y está contenida en un expediente que ya suma más de 1.500 fojas.

A requerimiento de este medio, Kreischer reveló parte del testimonio que brindó el jueves 5 de julio el capitán de navío Román Silva, quien ocupaba el cargo de director Operativo de Investigación Táctica de la Armada y que se retiró de la fuerza aparentemente por las serias disputas internas que se sucedieron luego de la tragedia naval.

Kreischer contó que Silva tuvo conocimiento de que en una misión que se realizó entre el 1 y el 19 de julio de 2017 en aguas del Atlántico Sur, el sonar del ARA San Juan captó el sonido de hélices de otro submarino que se le acercó a poco de que el comandante Pedro Fernández diera a conocer su posición.

Si bien esta circunstancia ya había trascendido y cobrado conocimiento público, la novedad es que el oficial de inteligencia (Silva) habría requerido al capitán de navío Claudio Villamide, por entonces jefe de la fuerza de submarinos con base en Mar del Plata, que le remitiera un informe de ese contacto subacuático.

Antes de acceder a esa petición, Villamide se habría comunicado con un superior, el contralmirante Luis López Mazzeo, que era el jefe del Comando de Alistamiento y Adiestramiento situado en la Base Puerto Belgrano (cercana a Bahía Blanca) y este le habría ordenado que no le suministrara a Silva ningún tipo de reporte sobre ese contacto.

UN MISTERIOSO DRON SUBMARINO

Las fricciones internas se habrían reactivado a los pocos días de ocurrida la tragedia naval (15 de noviembre de 2017) luego que desde el ARA San Juan se reportara una emergencia en altamar, frente a las costas de Caleta Olivia.

Retornaba desde Ushuaia y desde aguas cercanas a la Isla de los Estados, donde había cumplido una primera etapa de ejercicios de guerra que llevó a cabo junto a buques de superficie y debía encontrarse con otro submarino de la Armada, el ARA Salta para cumplimentar una segunda etapa.

Se presume que desapareció a unas doscientas millas, frente a las costas de la Península de Valdés ya que allí comenzaron a buscarlo con sus sonares varias naves de superficie de la fuerza, entre ellas la corbeta Spiro.

En ese punto vale recordar que este medio reveló que cuatro sonaristas de ese buque, seis días después de perderse el submarino, captaron durante doce horas golpes contra un elemento metálico de no menos de treinta metros que provenían de las profundidades.

Las relacionaron con la posibilidad de que pudieran haber sido un pedido de auxilio de tripulantes del San Juan ya que, a partir de sus experiencias, nunca antes habían escuchado ese tipo de contactos.

Pero tras comunicar esa relevante novedad a otros superiores, el comandante de la Spiro recibió la orden de abandonar la zona y dirigirse a otra posición por expresas directivas de López Mazzeo.

El mismo habría argumentado que el sonido que captaron los sonaristas era el de un dron submarino de una nave de los Estados Unidos que también se había sumado a la búsqueda, algo que generó un gran misterio.

Y es aquí donde, de acuerdo a lo comentado por la abogada Kreischer, en su testimonio el capitán de navío Román Silva dijo que por experiencia y conocimiento que tenía de flotas de guerra de otros países, la única armada que tiene un dron del tipo al que habría hecho referencia López Mazzeo, es la del Reino Unido de la Gran Bretaña y lo transporta en uno de sus submarinos nucleares.

En consecuencia, éste y otros testimonios sobre los que vino haciendo referencia El Patagónico desde que se iniciaron las investigaciones en el Juzgado Federal de Caleta Olivia, siguen comprometiendo de sobremanera tanto a Claudio Villamide como a López Mazzeo.

Hay que recordar que ambos fueron desplazados de sus cargos por quien era el jefe de la Armada, el almirante Marcelo Sur, el cual a su vez posteriormente fue destituido por el también cuestionado ministro de Defensa, Oscar Aguad.

(Fuente: El Patagónico)