Un judoca golpeó a tres menores en Caleta porque habían agredido su hija

Dos chicas de 14 y 15 años, junto con un varón de similar edad que intentó defenderlas, recibieron una fuerte golpiza en calles céntricas de Caleta Olivia por parte de un hombre que es instructor de judo. Fue una represalia por la agresión que había sufrido su hija. Las madres de las víctimas lo denunciaron ante la Comisaría de la Mujer y más tarde el individuo pidió disculpas a través de su cuenta de Facebook.

El violento suceso que causó indignación en la comunidad ocurrió alrededor de las 19 del sábado en la esquina de las avenidas Independencia y Monseñor Fagnano.
El agresor, que hace pocos años se jubiló como preceptor de una escuela pública, fue identificado como Mario Olivieri y actualmente dicta clases de judo en el denominado Galpón Murguero.
El mismo argumentó que tuvo “un momento de locura” al saber que su hija -también menor de edad- había sido atacada por otras dos o tres chicas adolescentes y fue a buscarlas a la zona céntrica para tomarse desquite.
Luego de ese violento suceso, las madres de las chicas, Silvia Usqueda y Marina Encina, junto a Elizabeth Biava, hermana de una de las menores, acudieron a radicar la denuncia ante la Comisaría Seccional Primera, donde se les recomendó que fueran a la Comisaria de la Mujer porque se trababa de un caso de “violencia de género”.

ESTABA ENARDECIDO

Tras ello hicieron conocer el caso a través de medios periodísticos y Elizabeth Biava relató que el hecho tuvo origen en una pelea entre dos chicas, a una o dos cuadras del lugar del hecho.
“Luego apareció el tipo y la golpeó a una nena, y se metió mi hermanita (Lourdes de 14 años) para defenderla porque vio que él la estaba golpeando fuerte”, pero también a ella la agredió físicamente.
“Mi hermanita quedó en estado de shock y no es justo que este tipo haya golpeado a varios menores porque encima estaba muy agresivo y golpeó a otros chicos que querían separarlo”.
“Ahora esperamos la respuesta de la juez. Queremos que se haga justicia por esta persona violenta, pese a que ahora a través de su Facebook publica disculpas que de nada sirven”, acotó.
Por su parte María Encina (mamá de Lourdes y de Elizabeth) repudió la actitud del judoca, señalando que “este hombre no tiene por qué andar pegando trompadas a la gente y menos a nenas”.
“Le pegó como si mi hija fuese un varón… le dio una trompada en la cabeza y otra en el cuello. Yo ni siquiera permito que su padre le levante la mano”, relató.
A su vez, la vecina Silvia Usqueda dijo que Olivieri profería frases discriminatorias a las nenas y mientras golpeaba a una de ellas le gritaba: ” gorda, tocaste a mi hija, ahora la vas a pagar».
Por otro lado, las denunciantes reprocharon a la gente mayor que pasaba por el sitio del incidente, dado que “nadie lo pudo parar, nadie fue capaz de agarrarlo”, a excepción de un muchacho que trabaja en una heladería que salió a defender a las chicas, pero que también fue víctima de la agresividad del judoca.

PIDIO DISCULPAS

En las primeras horas del domingo, Olivieri procuró reparar su violento accionar pidiendo disculpas a través de su Facebook personal, posteando el siguiente mensaje: “Ayer, una tarde lamentable, algo que no debió haber sucedido en un incidente con dos chicas, donde he ido en contra de lo que siempre he promovido a lo largo de mi vida, educar y tener valores”.
Agregó que “todos los que me conocen… saben el tipo de persona y padre que soy; siempre comprometido con el trabajo y lo social y ayer, en un momento de locura, olvidé todo eso y me siento terriblemente avergonzado”
Después dijo que “no conozco a las chicas ni a sus padres, pero entiendo el mal momento que les he hecho pasar. Pido públicamente mis sinceras disculpas. Entiendo el enojo en el que están inmersos y nada justifica mi accionar. A las chicas y a sus padres les pido mis más sinceras disculpas y perdón. Estoy avergonzado”.

(Fuente: El Patagonico.)