Camioneros chilenos denuncian tratos indignos y ocasionan paro indefinido

El 7 y 8 de abril del presente año se efectuó el quinto Comité de Integración Austral, el cual contó con la presencia del embajador de Chile en Argentina, José Antonio Viera-Gallo, y su par trasandino, José Octavio Bordón. Este último, en aquella ocasión aseguró, en cuanto al tránsito de los camiones chilenos por los pasos fronterizos y los controles carreteros de su país, que los procedimientos se realizarían de manera “más sencilla” y se generarían mejores condiciones para “todos los pasos con las menores intermediaciones posibles”.

Sin embargo, hasta el día de hoy, los transportistas nacionales han acusado a los servicios de fiscalización del país vecino de cursar multas onerosas, tener tratos indignos, vejatorios y hasta xenofóbicos, además de la ausencia de los funcionarios del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) argentino, equivalente al Servicio Agrícola y Ganadero (Sag) en Chile, en el paso fronterizo de Integración Austral, en Monte Aymond, situación que ha obligado a los camiones chilenos a ingresar a la ciudad de Río Gallegos para realizar las diligencias netamente de frontera. 

Del mismo modo, el gremio criticó que en algunas provincias trasandinas no existe la igualdad, la dignidad y la reciprocidad en el transitar de los camioneros nacionales por el territorio argentino, hecho que no sucede cuando los transportistas del país vecino, excedidos en pesos y las medidas estipuladas, circulan en suelo chileno sin sanciones ni fiscalización, enfatizando que las autoridades trasandinas someten a los compatriotas a duras restricciones, sanciones y multas.

Ante esta realidad, y debido al hecho de que no se ha manifestado concretamente una mediación efectiva por parte de las autoridades nacionales para favorecer una condición recíproca, los trabajadores pertenecientes a la Asociación Gremial de Dueños de Camiones de Punta Arenas (Asoducam) efectuaron una reunión de coordinación a las 7 horas de ayer, en la cual se determinó bloquear la circulación de todo tipo de camiones, enfocándose en los argentinos, reteniendo más de 150 máquinas en la ruta internacional CH-255 a Monte Aymond, a la altura del cruce con la vía CH-257 en dirección hacia Punta Delgada, a 156 kilómetros al noreste del centro de Punta Arenas, permitiendo únicamente el paso del resto de los vehículos que circulaban en ambos sentidos.

“Nosotros estamos haciendo un paro por las problemáticas que afectan al transporte de carga para transitar por territorio argentino. En estos momentos tenemos camiones retenidos, tanto en las localidades de Tres Arroyos, como en Gobernador Costa y Gobernador Gregores, de trabajadores chilenos que están siendo, incluso, indignamente tratados por funcionarios trasandinos de Vialidad. Hay un acuerdo bilateral para que circulen libremente los vehículos que tengan más de 18,60 metros de longitud. Eso se cumple en Chile, no así en el país vecino. Lamentablemente en estos temas siempre ha faltado voluntad política, y acá los transportistas adolecen de políticas públicas reales y verdaderas, porque el ministro de Transporte está preocupado del Transantiago y nadie se preocupa de lo que ocurre en estas latitudes, sabiendo que somos una zona estratégica y geopolíticamente importante, pero sólo se hace notar en tiempos de elecciones”, criticó enérgicamente Miguel Cárdenas Salazar, presidente de Asoducam.

Paciencia y comprensión trasandina

En otra arista, los transportistas argentinos avizoraban una extensa estadía en la carretera nacional, ante la medida de presión que dilataba la entrega de todo tipo de abastecimiento que los ruteros debían trasladar. Entre la paciencia y la resignación, los conductores compartían el mate, fumaban cigarrillos y, con chistes y bromas, dialogaban con los manifestantes, en un intento de entender el contexto de la protesta.

“Esto se ve mal, porque acá no tenemos nada, ni baños, ni comida, ni nada, pero estamos apoyando el hecho que hayan parado por sus demandas. Todos tienen derecho a eso”, relató Cristián Galván, camionero argentino, palabras que se unen a las de su compatriota Rubén Lagos, que tenía que transportar su carga a la ciudad de Ushuaia, quien consignó que “cuando voy a Brasil, yo me tengo que adecuar a las reglas y normativas que allá me exigen con el camión, pero acá los chilenos están muy pasados en la longitud que está establecida porque compran máquinas norteamericanas que son de ese largo, y por eso los multan”.

“Todas son problemáticas de las autoridades argentinas”

No obstante, tras enterarse de la interrupción de la vía, el seremi de Transportes, Gabriel Muñoz Obando, se dirigió hasta el lugar pudiendo entablar una conversación con los dirigentes de la protesta, lo que derivó en que el secretario regional se dirigiera hasta el paso fronterizo Integración Austral, para verificar y pedir explicaciones respecto a cómo estaba funcionando el Senasa en dicho complejo.

“Tuvimos informaciones de algunas autoridades argentinas de que efectivamente es cierto lo que plantean los dirigentes de Asoducam, de que el Senasa ha dejado de funcionar hace tres años. Se ha estado solicitando que los funcionarios de este servicio estén presentes en el paso fronterizo, pero nos señalaron que es por un tema de dotación, por lo cual es un tema que tenemos que ver y revisar para poder plantearlo en el encuentro binacional entre intendentes y gobernadores, en diciembre próximo, para que estos temas se puedan analizar y solucionar”, indicó Muñoz, recalcando que “todas son problemáticas de las autoridades argentinas, que se han visto a través de las Cancillerías como también con el subsecretario de Transporte Automotor”.

De igual forma, Cárdenas fue enfático al manifestar que el paro continuará de forma indefinida, sentenciando que “nosotros no podemos aceptar ambigüedades en el sentido de no tener una garantía real y efectiva de que lo que se va a solucionar va por el camino correcto, y que esté por escrito para que nosotros tengamos algo que mostrarles a nuestros asociados y también poder tener la tranquilidad de que nuestros transportistas están garantizados para transitar por territorio argentino sin problemática alguna. Estamos esperanzados de que la Cancillería y los personeros de gobierno del país vecino, tanto la Subsecretaría de Transporte Automotor argentina, a través de la Dirección de Vialidad, puedan darle solución a esta situación en lo que respecta a la fiscalización de los malos tratos”.

(Fuente: La Prensa Austral.)