Siguen sin fecha de reinicio las represas hidroeléctricas

Si bien se confía que se retomen las tareas en este último trimestre del año, ayer el ministro de Energía ratificó que la obra recomenzará sólo luego que sean culminados los nuevos estudios de impacto ambiental. El funcionario también cruzó a De Vido y aportó detalles técnicos del nuevo proyecto.

Que mayo, que agosto, que septiembre u octubre. La verdad es que si bien en los obradores de las represas hidroeléctricas está todo preparado para retomar las tareas a pleno, por ahora continúa sólo una tarea de mantenimiento.
“El proyecto de represas sobre el río Santa Cruz se encuentra en etapa de estudios tendientes a completar el análisis de sus aspectos ambientales, previo a la ejecución de las obras” indicó el ministro de Energía Juan José Aranguren en una extensa nota de opinión que publicó en el diario Ambito Financiero en contestación a otra columna escrita por el diputado nacional y ex ministro de Planificación Federal Julio Miguel De Vido.
De esta forma, ratifica lo dicho por el ministro Bergman, quien en su visita a Río Gallegos sostuvo que “no se pueden generar falsas expectativas, hasta que no se hagan todos los estudios de impacto ambiental (lo que incluye una nueva audiencia pública) no se retomarán los trabajos”.
La única certeza es que la decisión política de hacer las represas está ratificada en el Presupuesto 2017, donde la obra está incorporada con su partida presupuestaria correspondiente.
El titular de la cartera de Energía rechaza el argumento de De Vido sobre el régimen operativo de las centrales, “es decir, su operación en ‘base’ (continua) o en ‘punta’ (cuando el despacho lo requiere) y su supuesta relación con el federalismo es un desacierto de tal magnitud que sólo puede explicarse en la voluntad de confundir a la opinión pública, aprovechándose de la complejidad técnica del tema” planteó Aranguren.
Aseguró que “la energía aportada al sistema interconectado nacional, con o sin ‘empuntamiento’, son electrones que no conocen de ideologías y que circulan por los cables de la red dirigiéndose hacia los puntos de consumo de todo el sistema, estén los mismos ubicados en la Patagonia, en la Puna o en Buenos Aires. En todo caso las restricciones para cada desarrollo regional están en el sistema de distribución y llegada a los puntos de consumo y no en el funcionamiento en punta o en base del sistema de generación”.
A la hora de dar detalles técnicos de cómo quedó el proyecto de las represas, indicó que la “Néstor Kirchner” (NK) “operará empuntada” y la denominada “Jorge Cepernic” (JC) “es la que trabajará en base”, indicando que con esta combinación se evita “la afectación del régimen del río en todo el tramo aguas abajo hasta su desembocadura en la ría. El conjunto NK-JC tendrá un esquema de funcionamiento muy similar a El Chocón-Arroyito, sobre el río Limay, cuyo caudal es coincidente con el del río Santa Cruz”.
Para el ministro, si se respetaba el proyecto tal cual estaba “lamentablemente, se habría afectado la oscilación normal del Lago Argentino y los glaciares relacionados. Fue por eso que hubo que bajar la cota del embalse de NK en 2,40 metros para desacoplar dicho embalse en forma total del Lago Argentino, y además hubo que subir la cota del embalse de JC en 1,80 metros, para evitar que un tramo del río quedara sin agua en parte del día, y al mismo tiempo para recuperar energía”.
Y aclara que “con este cambio de cotas, imprescindible para no afectar al ambiente, se llega a una energía media anual de 5.245 gigavatios-hora (este número que aporta el ex ministro esta vez es correcto). Con la disminución de 11 máquinas a 8, la energía media anual será de 5.189 GW-h”.
“Nuestra administración conoce y respeta la Constitución Nacional, en particular lo establecido en el artículo 31 de la misma. La Ley Nacional 15.336 establece que cuando una represa de este tipo genera electricidad y está conectada al sistema eléctrico nacional (SADI) su explotación corresponde a la competencia del Estado Federal. O sea, el Estado Federal, que además en este caso construye los aprovechamientos hidroeléctricos y pagará por ellos, es quien debe recibir los ingresos por la venta de la energía generada”, defendiendo así los cambios jurídicos que se ingresaron en el proyecto por el cual la Nación se queda con la propiedad de las represas una vez completado el repago. “Así lo dice esa ley, que ya con anterioridad a la Constitución de 1994 contempló los derechos de las provincias por la utilización de sus recursos hídricos, reconociéndoles una compensación del 12% sobre los ingresos por venta de energía, además de su competencia exclusiva en relación con los usos del agua. La modificación del acuerdo original firmado entre la Nación y la provincia de Santa Cruz para adecuarlo a estas pautas legales ya se encuentra en curso, con el consentimiento de la gobernadora Alicia Kirchner”.

(Fuente: La Opinión Austral.)